Escribo algunos textos de amor. ¿Soy romántica? Es posible que algunos signos de agua en mi carta astral sean los responsables de ello. Hablo de un «amor», pero ahora no comparto mi vida con ninguna pareja. ¿A quién le hablo entonces? ¿A quién llamo amor realmente? ¿Es posible hacer crecer el amor en una pareja si antes no se hace crecer en uno mismo? ¿Es la pareja la que hace que yo tenga un buen o gran sentimiento, o es uno mismo el que sabe conectar con un amor “más grande” y sabe llevar eso a la pareja? ¿Qué es más adecuado? ¿Darle la responsabilidad a un hombre de crear un gran amor en la relación? ¿O mejor crear uno mismo un gran sentimiento amoroso por la vida, por las personas, por el mundo, por los placeres y llevar ese amor a la pareja? Qué bueno hacer crecer el amor en uno mismo y saber que con el otro sólo se trata de hacerlo vibrar. Vibremos juntos, amor…

Amor, tú me inspiras.
Me vinculas a la vida.
Me devuelves a la presencia.
Me conectas con la eternidad.
Elevas mi espíritu.
Tú amor, solo tú.
Siempre…

Jajaja, ya estoy otra vez. Puede verse con claridad que un ser humano no podría darme eso. La energía procede de uno mismo. ¡Dedicado a todos! ¡A la vida! ¡Al universo! ¡A mí misma! 😉

Eternamente,
Beatriz

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